Mercado Cardonal

Seguimos con cocina de Valparaíso. El objetivo esta vez era ir al Mercado Puerto, el más conocido, ubicado en el casco histórico de la ciudad, pero ya estando allá nos dijeron que lo habían clausurado por daños provocados por el terremoto. Así que cambiamos de plan, y fuimos al Cardonal, cercano a la Católica de Valpo, en Brasil con Uruguay.


Fue construido en 1907, con una arquitectura basada en pernos y vigas de acero, casi sin soldaduras, lo que lo convierte casi en un mecano, que ha soportado perfectamente varios terremotos (gracias Google). Es como una mezcla entre la Vega y el Mercado de Stgo, abajo se encuentran los puestos con frutas, verduras, pescados y mariscos (y uno que otro revendedor de abarrotes), y en el segundo piso están las cocinerías. Conviene darse la vuelta completa antes de elegir un local, y no dejarse llevar por las múltiples "captadoras" que salen como buitres a llamar la atención de los clientes (sí, da un poco de miedo).

Después de dar como 3 vueltas (y tener que decir "no, gracias" como 15 veces) elegimos "El Mesón", el local 131, básicamente porque el dueño no se nos tiró encima, y estaba más lleno y bonito. Nos atendieron enseguida, por lo que yo creo es el mozo más simpático y buena onda que ha existido en la vida. No sé si lo harán con todos los clientes, pero inmediatamente después de ordenar, nos trajo unos consomés (perfectos para el día frío) por cuenta de la casa. Y, al terminar el almuerzo, nos ofreció bajativos, que claramente aceptamos. 

Ahora, la comida. Yo pedí una empanada de queso camarón, que puede sonar cara -$1500- pero vale completamente la pena. Además de sabrosa y jugosa, tenía MILLONES de camarones, demasiado abundante, no como las cagás que venden en otros lugares con 3 camaroncitos camuflados.   Mientras la comía llegó a la mesa el plato principal, un pastel de jaiva que se veía tan rico que me costó mucho terminar la empanada (según el mozo me lo dejó bien cerca para tentarme, jaja). Éstas fueron las 5 lucas mejor gastadas de mi vida. Casi siempre pido pastel de jaiva cuando voy a restoranes de playa, y realmente éste los superó a todos. 

Llegó calentísimo, con las burbujitas de queso llamándome a gritos. No sé como describirlo en palabras (así de cuático), pero con ver la foto me dan unas ganas terribles de sacar un pedazo. Con muuucho queso, y la mezcla de jaiva y pan demasiado deliciosa.. pedacitos de cielo, en serio. Al final tuve que recibir ayuda para terminarlo, perfectamente pueden comer 2 personas de esa porción (y para qué hablar del raspadito que queda al final... ñaaaaaam). 

Después de ese abundante almuerzo (quedamos terrible de yenifer), qué mejor que unas manzanillas de regalo =). 

Osea, $1500 la empanada, $5000 el pastel y $700 la bebida. Vayan. Ahora. Y por si acaso, no aceptan redcompra, pero te indican donde queda el cajero automático, te esperan, y celebran tu regreso =).